¿LIBRE DE SER QUIEN SOY?
En las instalaciones de todas las plantas de Cartón de Colombia exponen con orgullo carteles que hace alusión a la inclusión, la diversidad y la igualdad; muy bonito en teoría, pero ¿de verdad somos libres de ser? Somos obreros sindicalistas, padres, hermanos e hijos; entonces se nos generan unas dudas, ya que actualmente se evidencia un sesgo y persecución marcada y consistente del superintendente Alexander Marín en la planta de Bogotá.
– ¿Somos libres de ser quien somos?
No, lastimosamente no se puede ser libre si nos estigmatizan por querer ser lo qué somos.
– ¿Existe la inclusión?
No, nos excluyen por pensar, hablar y ser diferentes, ¿o por qué han sacado a un lado los compañeros que nos lideran?
– ¿Diversos?
No, nos tachan por pertenecer a una cultura y estilo de vida diferente.
¿Iguales?
La respuesta es sencilla: el plan individual discrimina.
– ¿Gozamos del libre derecho a la asociación?
Sabemos bien la persecución y segregación que hemos sufrido los trabajadores que pertenecemos a esta gloriosa organización.
También, desde hace unos años en que esta administración tomó las riendas de la compañía pocas veces podemos ser padres, hermanos e hijos, con la imposición de venir a trabajar los días destinados a disfrutar al lado de ellos. Si bien dirán que somos libres de decidir si venimos, nos sentimos intimidados, temerosos cuando nos negamos y nos hacen subir a la oficina de superintendencia con el fin de «negociar» otro día de descanso en un día entre semana donde los hijos, hermanos estudian y nuestras parejas trabajan; y eso, si así se «acuerda» del tema al supervisor de turno y se le da la gana de darnos un día ya negociado; con la excusa, ¡por ahora no se puede! incumpliendo abiertamente la ley laboral vigente que garantiza el descanso obligatorio.
Entonces concluimos que realmente no gozamos de libertades ni mucho menos de inclusiones, solo se nos quieren mostrar como una compañía inclusiva y respetuosa de nuestros derechos y libertades, siendo solo unos acomodados a las tendencias actuales y pretender mostrar lo que realmente no son, bien dice el viejo refrán: uno es lo que hace mas no lo que dice ser.
Para sumar algo más, ahora uno de los principales problemas que se vienen teniendo en la seccional de Bogotá, es la negación por parte del superintendente Alexander Marín para hacer la revisión de los exámenes teóricos del llenado de vacantes, sencillamente no permite hacer la revisión en presencia de la persona que hace la petición, solo se está limitando a decir que ya se revisó y que está bien calificado, como si además a él en ese puesto de alta administración le correspondiera estar calificando y revisando los exámenes, como sino hubiera ingenieros de procesos o supervisores, microgerencia? o ganas de discriminar y afectar a los trabajadores sindicalizados? Si nos queda la duda, si en una Multinacional como Smurfit Kappa, estos puestos de alta administración, con tan excelentes remuneraciones, están para realizar este tipo de funciones o mas bien para realizar obras y procesos que ayuden al crecimiento de la empresa y al bienestar laboral.
En todo caso, desconfiamos de este tipo de metodologías para la revisión de exámenes, mas cuando de forma déspota y autoritaria nos impone que las cosas las van a seguir haciendo así, que porque en la Convención no dice explícitamente lo que se le pide o porque se hace la correspondiente denuncia en el departamento de Personal; como si la transparencia, la ética y el sentido común se tuviera que estar pidiendo solo porque este escrito.
A ese paso en el próximo pliego vamos a tener que poner que suministren papel higiénico y agua potable en los baños, porque en la Convención tampoco este escrito que se deba suministrar y de pronto en un arranque de ira el señor Marín va y lo quita.
Sintracarcol es un sindicato Nacional y cuando las cuestiones no se pueden resolver de manera local, siempre existe el recurso de llevar los casos al departamento de Personal, que, dicho sea de paso, lo único que hizo en este caso fue agravar la situación y no resolvió nada, como se les esta volviendo costumbre con los reclamos.
Hay una creencia falsa y arrogante de varios administradores de la empresa que piensan que el sistema de vacantes es un favor que nos hacen y por eso tratan de incidir en el proceso para torpedear el ascenso de personal sindicalizado, al que ahora le ven errores y defectos que cuando no estaban en el sindicato no les veían, cuestiones inclusos que rayan en la discriminación, por el tipo de pelo, tatuajes, música que escuchan o tribus urbanas a las que pertenecen.
Una situación supremamente hostil, degradante y retardataria por lo demás, en estos tiempos donde mucho se pronuncia en papeles, correos y comunicados y muy poco se aplica en la realidad, sobre todo si son trabajadores sindicalizados.
Aun así, seguiremos…
EL EMPERADORCITO DE LA SABANA
Cuenta el relato que recién iniciada la gesta libertadora para independizarse de la Corona Española, alrededor de la sabana de Bogotá muchos caseríos se empezaron a declarar unilateralmente en independencia.
En uno de estos caseríos, surgió la leyenda de un criollo que se declaró emperador del sitio, pero al no tener quien validara su título nobiliario, se autodeclaró emperadorcito del caserío para poder mandar y disponer como su ego se lo exigía.
Su mandato no duro, ni obras dejo, pero la leyenda del emperadorcito sin imperio quedo en la memoria de la sabana.
JUNTA DIRECTIVA NACIONAL
¡Sindicalismo es paz, Sindicalismo es justicia social!
Sintracarcol. 14 de septiembre de 2021.
Sindicato Nacional de Trabajadores de Cartón de Colombia.
¡Sintracarcol siempre!